Tailandia.
Tierra de colores. De sabores que atrapan. De danzas hipnóticas. De sonrisas eternas.
Asia en estado puro.
Un país que conquista más allá de sus fronteras. Que se desparrama por sus islas y montañas. Por sus ruinas y rascacielos. Donde el monzón y los intensos rayos de sol conviven en perfecta armonía.
Tailandia. Un lugar donde se VIVE. Donde cada segundo cuenta. Donde sentir. Donde aprender.
Donde mundos diferentes se unen. Norte y sur. Este y oeste.
Donde los contrastes armónicos otorgan las estampas más impresionantes. Paisajes inolvidables. Experiencias irrepetibles.
Tailandia. Con sus túnicas naranjas omnipresentes.
Con sus ofrendas. Sus oraciones. Sus templos… Con su religión, símbolo de cotidianeidad sin la que todo deja de tener sentido.
Tailandia. País en el que siempre habrá algo más por descubrir.
Con estas 10 imágenes resumo mi último viaje a uno de los rincones del mundo donde siempre querré regresar. ¡Espero que os gusten!
Y esta, de regalo…
Tailandia siempre enamora. Preciosas fotos! Gracias mil por ellas
Gracias a ti, Paqui!! Un besote gordo y ya sabes, eres bienvenida por aquí siempre que quieras! 🙂
Tailandia siempre me trae muy buenos recuerdos. Las fotos como dice Paqui son muy chulas.¿Estuviste también en el templo negro de Chiang Rai? Curiosamente a mí me gustó más que el blanco y eso que se supone que representa el infierno jajajaj